Al despertar Gregorio Samsa una mañana, tras un sueño intranquilo, se encontró en su cama convertido en un monstruoso insecto. A esa primera frase, que despierta los temores del lector, le sigue un mundo de pesadilla (“kafkiano”), donde lo cotidiano se vuelve incierto y opresivo.
Mi experiencia con el libro:
Un libro para leer y releer. Me provocó tristeza el estado de Gregorio y como su familia lo aparto, después de que él fue el sustento de la familia ,y la soledad en que quedó, sólo unas pinceladas de belleza en un melancólico relato.